La CAEM advirtió que el cobro de estos impuestos desalienta inversiones y quita recursos a la exploración
La Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM) prepara una presentación formal ante el Gobierno nacional para insistir en la eliminación de las retenciones a las exportaciones de plata y litio. El planteo, dirigido a la administración de Javier Milei, cuenta con el respaldo político de las principales provincias productoras —Jujuy, Salta, Catamarca y Santa Cruz— aunque en esta última el impacto se concentra especialmente en una operación.
El sector privado sostiene que la lógica utilizada por el Gobierno para reducir retenciones al petróleo —vinculada a los elevados costos de extracción en yacimientos maduros y a la necesidad de evitar importaciones— es la misma que enfrenta hoy la minería de plata y litio. Con precios internacionales deprimidos y operaciones con creciente madurez geológica, las empresas advierten que mantener este esquema fiscal limita la competitividad.
Gestiones trabadas y un nuevo frente de diálogo
Hasta ahora, las compañías intentaron canalizar el reclamo a través del secretario de Minería, Luis Lucero, y del área de Coordinación de Producción a cargo de Pablo Lavigne, pero no recibieron una definición. Por eso, evalúan abrir el diálogo con otras dependencias del Ministerio de Economía para acelerar la discusión.
Los gobernadores de las provincias mineras también se disponen a acompañar el pedido en un contexto internacional desfavorable para el litio y con yacimientos de plata cada vez más maduros. Buscan evitar quedar atrás respecto del esquema de incentivos que recientemente benefició al sector hidrocarburífero.
Una distorsión tributaria que golpea a la plata
Desde enero de 2024, el oro dejó de pagar retenciones debido al vencimiento del Decreto N.º 908/21. La plata, en cambio, continúa alcanzada por los derechos de exportación, lo que genera un desbalance fiscal en operaciones donde este mineral es predominante.
En Santa Cruz, la provincia más afectada por esta situación, figuran Mina San José (Minera Santa Cruz) y Cerro Moro (Pan American Silver), aunque en este último caso con un impacto menor por su mayor equilibrio con el oro. También se ven alcanzadas Mina Pirquitas, en Jujuy, y Lindero, en Salta.

El gobernador Claudio Vidal volvió a reclamar una corrección del esquema actual. En diálogo con La Opinión Austral sostuvo que “el costo extractivo del oro y la plata es el mismo, pero la plata tiene retenciones y el oro no; es injusto”. También vinculó el tema con la sustentabilidad operativa: “Lo que se paga por la plata debería destinarse a exploración, no a la Nación. La exploración es lo que más tiempo y recursos demanda”.
El sector privado: yacimientos maduros y necesidad de explorar
Desde casi dos años las compañías mantienen el reclamo. Néstor Rigamonti, gerente general de Minera Santa Cruz, explicó a Santa Cruz Produce que San José ya muestra signos avanzados de madurez y que la continuidad operativa requiere más inversión exploratoria.
Recordó que la operación produce concentrados y barras de plata en bruto, justamente los productos que quedaron fuera de las exenciones:
“Hace un par de años, muchas posiciones arancelarias metalíferas fueron eximidas de retenciones, pero no todas. Los productos que siguen alcanzados son los que producimos nosotros”.
Rigamonti cuestionó la lógica de esa diferenciación: “No existe argumento técnico ni económico para esa distinción. Tampoco implica mayor valor agregado. Y, desde lo fiscal, los productos alcanzados aportan mucho menos que los que están exentos”.
El punto central —coinciden las empresas— es que las retenciones restan recursos clave para la exploración, indispensable para extender la vida útil de los yacimientos:
“Seguimos pagando y eso limita la posibilidad de financiar campañas intensivas. Después de casi 20 años, operamos gracias a la exploración, pero hoy los resultados son marginales”.
Un reclamo que atraviesa política y economía
El mensaje final del sector resume la tensión con la Nación: “Es un tema nacional. Hacemos gestiones, el Gobierno conoce la situación, pero los tiempos políticos no los manejamos”.
En medio de precios internacionales debilitados y un mapa geológico que exige nuevas inversiones, la minería de plata y litio busca recuperar competitividad y equiparar su esquema fiscal al de otros sectores estratégicos.


