La automotriz china BYD presentó su innovador sistema Super e-Platform, una tecnología que permite cargar las baterías de un auto eléctrico en tiempos ultrarrápidos, alcanzando 470 km de autonomía en apenas cinco minutos. Con una potencia de hasta 1.000 kW, este avance supera ampliamente los supercargadores de su principal competidor, Tesla, que llegan a los 500 kW.
Este desarrollo refuerza la apuesta de BYD por consolidarse como líder en la industria de vehículos eléctricos. Según Wang Chuanfu, presidente de la compañía, el objetivo es equiparar los tiempos de carga de los autos eléctricos con los de combustión, eliminando una de las principales barreras de adopción de esta tecnología.
Junto con la presentación del Super e-Platform, BYD lanzó dos nuevos modelos eléctricos que incorporarán este sistema: la berlina Han L y el SUV Tang L. Además, la empresa anunció la construcción de más de 4.000 estaciones de carga ultrarrápida en China, acompañando el crecimiento del sector.
El éxito de BYD se refleja en sus números: en febrero, sus ventas aumentaron un 161%, alcanzando las 318.000 unidades. Mientras tanto, la creciente influencia de la industria china en el mercado de baterías ha llevado a la quiebra de competidores europeos, consolidando a China como el mayor fabricante y exportador de baterías a nivel mundial.
Fuente: Ámbito
